El transporte pesado de mercancías por carretera lleva años trabajando en la reducción de emisiones de CO₂. Desde los fabricantes, con el desarrollo de motores más eficientes, a los transportistas que, además de empezar a usar combustibles renovables, están optimizando las cargas y los trayectos realizados por los camiones con el apoyo de la digitalización.

Otro factor clave es la optimización de las rutas y la reducción de lo que denominan “kilómetros en vacío”. Ontime utiliza algoritmos para planificar sus rutas teniendo en cuenta factores como las distancias a recorrer, las características de los camiones o las restricciones e incidencias que se pueden dar en el tráfico. Además, realiza la carga con básculas volumétricas que permiten aprovechar al máximo el espacio disponible en el camión y, de esta forma, reducir el número de viajes necesarios.

A todas estas mejoras hay que añadir los cursos específicos que reciben los conductores de Ontime para conocer mejor los sistemas del camión y realizar una conducción suave y a velocidades constantes, una formación que cada vez resulta más generalizada en el sector del transporte. “Invertimos mucho en la formación de conductores, un profesional bien entrenado puede reducir el consumo entre un 7 y un 10%”, explica Ramón Valdivia, de Astic.

Los cursos de conducción eficiente para conductores son también una de las herramientas utilizadas habitualmente por Scania para reducir el consumo de combustible de sus vehículos. Además, este fabricante de camiones está usando los nuevos sistemas de digitalización y conexión para monitorizar su funcionamiento y, de esta forma, poder mejorar de forma constante su eficiencia, explica Alberto Linares, su director de Sostenibilidad.

A esto hay que unir la progresiva incorporación del  combustible 100% renovable, que es compatible con los motores actuales de los camiones. En España, Sesé y Repsol han llegado a un acuerdo de suministro de ocho millones de litros de este tipo de combustible en los próximos dos años, una cantidad que serviría para recorrer 26,6 millones de kilómetros por vía terrestre. Su uso representará una reducción estimada de 18.000 toneladas de CO₂, al suponer una reducción de hasta el 90% de las emisiones de CO₂ en comparación con el combustible de origen mineral al que sustituye. En la actualidad, el 15% de la flota propia de transporte de mercancía de Sesé en España ya opera con combustible renovable.

Otra alternativa para optimizar el transporte de mercancías es la intermodalidad u optimización en el uso de los distintos modos de transporte, principalmente el tren. Para sus rutas entre Francia y Reino Unido, por ejemplo, los camiones de Ontime utilizan el Eurotúnel, lo que les permite no solo emitir hasta 12 veces menos CO₂ que si utilizasen el ferry, sino cumplir sus plazos de entrega con sus clientes gracias a un viaje que dura solo 35 minutos. Aunque la Comisión implementó hace décadas el programa Marco Polo para transferir mercancías de la carretera a otros medios de transporte, la cuota de transporte ferroviario solo se ha incrementado un 1% en diez años. España, que tiene una cuota muy baja en transporte de mercancías ferroviario interior, quiere potenciar este medio de transporte y llegar al 10% de cuota modal. Para ello tiene en marcha la iniciativa Mercancías 30, con medidas que incluyen desde la ampliación de vías para abaratar costes, la electrificación de líneas de mercancías no electrificadas y la rehabilitación y mejora de líneas ya electrificadas.